Sin duda, las ideas y el talento de las personas son la clave del éxito de las organizaciones. Los miembros de los equipos de trabajo, tanto internos como externos, son el centro de la colaboración empresarial. En este contexto nace la figura del iWorker.
Con la entrada en el mercado laboral de las nuevas generaciones, especialmente los millennials, y su forma de trabajar basada en la tecnología, las necesidades en el lugar de trabajo están cambiando. Los intereses de la nueva fuerza laboral no son los mismos que los de generaciones anteriores. Las empresas se enfrentan, por tanto, al reto de dar respuesta a las necesidades de los diferentes perfiles de trabajadores. El objetivo es impulsar la innovación, la cocreación y, por tanto, la productividad.
La solución es adoptar nuevas maneras de trabajar que fomenten el trabajo en equipo, el intercambio de ideas y talento. En definitiva, la colaboración empresarial ya no es una opción sino un elemento estratégico para las empresas.
iWorker, el protagonista de la colaboración empresarial
Así nace el concepto del iWorker. Se trata del trabajador colaborativo, que prima la movilidad y la flexibilidad. El iWorker trabaja por proyectos y en grupo, es multidispositivo y multitasking y vive continuamente conectado. Por ello, basa su trabajo en herramientas digitales y en soluciones de comunicación que le permiten tener acceso seguro a toda la información. Así, puede intercambiar ideas en cualquier momento y lugar y desde cualquier dispositivo.
Para dar respuesta a sus necesidades, el lugar de trabajo debe fomentar la colaboración empresarial basada en 3 pilares: personas, tecnología y espacios.
El iWorker transforma la cultura empresarial
Para obtener el máximo potencial del iWorker, las organizaciones deben adoptar una nueva cultura empresarial. Se trata de ser más abiertos y menos jerárquicos y de dar prioridad al trabajo en equipo y la interacción. La colaboración en el entorno laboral favorece la creatividad y el aprendizaje. Además, permite mezclar habilidades complementarias para conseguir un resultado mejor a la hora de enfrentarse a un proyecto.
Las organizaciones deben también adoptar nuevos baremos para premiar el trabajo de sus colaboradores, alejados del presencialismo. Gracias al intercambio de ideas, el iWorker genera un valor real para la empresa e impulsa su productividad.
Otra de las demandas del iWorker es el trabajo basado en la movilidad y la flexibilidad. Hablamos de la posibilidad de trabajar en diferentes espacios, sin tener un lugar de trabajo fijo, y con horarios adaptados a las necesidades de cada uno. Este cambio de mentalidad debe instalarse en todos y cada uno de los miembros de la empresa. Asimismo, todos deben mejorar su conocimiento tecnológico y adoptar nuevos hábitos de trabajo híbrido —remoto y presencial—.
iWorker, siempre conectado
Las soluciones de colaboración empresarial son imprescindibles en este nuevo escenario. Básicamente, hablamos de soluciones de comunicación a distancia y de gestores de contenidos. Estas permiten que los iWorkers trabajen conjuntamente desde cualquier lugar y dispositivo. Tienen especial importancia las pantallas interactivas y los sistemas de videoconferencia. También las soluciones para acceder y compartir información en la nube de manera inmediata y actualizada en cualquier momento sin renunciar a la seguridad.
Contar con soluciones integrales de colaboración empresarial hace que el iWorker sea más eficiente. Tanto en el trabajo individual como en las reuniones con otros miembros del equipo. Además de mejorar su experiencia de usuario, la tecnología de colaboración empresarial agiliza y mejora las tomas de decisiones y, por tanto, la productividad de tu organización.
Centros de recursos para el iWorker
Por otro lado, los espacios de trabajo deben adecuarse a la actividad del iWorker. Los espacios diáfanos son un buen lugar donde compartir ideas en cualquier momento, pedir ayuda o aportar un feedback de forma más espontánea.
Pero también necesita lugares de trabajo que sean centros de recursos tecnológicos que le ayuden a trabajar en equipo. Es lo que en Ricoh llamamos el Workplace+, un concepto que engloba los espacios y recursos tecnológicos necesarios para hacer posible la interacción.
Aquí cobran especial importancia las salas de reuniones, que son ya el escenario principal de la colaboración empresarial. Estas están transformando su rol. Están adaptando su configuración a las necesidades específicas para cada caso, teniendo en cuenta el número de personas que interactúan y la tecnología que necesitan.
¿Otros beneficios de ser un iWorker?
Aparte de las ventajas que hemos comentado, trabajar como un iWorker supone un ahorro de costes y tiempo, al permitir el intercambio de ideas sin necesidad de desplazarse. Esto conlleva también una mayor sostenibilidad ya que, evitando los desplazamientos, contribuimos a reducir el número de emisiones de CO2.
Consigue que tu organización se más ágil y productiva. Trabaja de manera flexible e inteligente. Mejora tu experiencia en tu lugar de trabajo y sé feliz.
Estoy totalmente.de acuerdo, con la filosofía descrita, para la Empresa Moderna del siglo XXI.
Me ha gustado el articulo, pero para mi creo q le faltaria un ejemplo de una solucion tecnica real de espacio.
Un saludo
Gracias por los comentarios. En este otro post podéis ver los diferentes tipos de salas de reuniones con sus características, según los recursos técnicos de los que disponen y su capacidad.
Y en este otro encontraréis toda la información sobre el sistema de gestión de salas de Ricoh.
Además, estamos trabajando en ofreceros casos de éxito reales. Pronto los compartiremos con vosotros.
Interesante.
Esta muy bien
Creo que es muy interesante. A tener en cuenta.